Suelo mojado. Nubes grises. Tu cara sonriente. Las ganas de nuevas emociones. Tus labios oscuros. Tu pelo negro. Tu mirada penetrante. Tibia lluvia. Sangre en los labios. Deseos hacia ti. Ganas de estar ciego. Pasto verde. Basúra.
Sufrimiento duro, sufrimiento futuro.
Segundo piso. Pabellón repleto. Tu falda, tu uniforme. Tu perfume. No me siento conforme. Olor a muerte, tu mirada otra vez. Puertas grandes y antiguas. Entro. Cierro. Manjar y aceite. Dolor. No estoy conforme. Gente, mucha gente. Escape. No estamos. Si estamos. Cigarros. Autoridad. Vino. Vomito. Tus labios. Tu ojo. Mis catorce, tus quince. Las reglas; se quiebran.
Sufrimiento duro, sufrimiento futuro.
Vino. Más vino. Tus cigarros. Tu calificada risa. Nuestros amigos. Principio de año. Dosmil cuatro. Tu emoción, tú femenina. Tu doble personalidad, tu casi esquisofrenia. Me gusta. Me desorientas. Me embriagas, me dejas desnudo frente al mundo. Tus obsesiones, tus cuerpos sin vida, tus recortes de diario. Más vino, más vino. Todo un contexto. Dosmil cuatro, primer año. Bajas calificaciones. Tus amigas y mis amigos. Nosotros dos juntos. Mi mano con la tuya. Tu cerebro. Ya no estás.
Sin entramparse, abandonar el juego del deseo de el amor, de las
pasiones... de el fantasma de todo lo que no es, con sus cargas potentes,
en la insatisfac...
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