Ubi vos exigo evolutio, ego volo ascio vestrum animo. Tu es pestis.

© Francisco Javier Maureira P. 2005 - 2017

8.1.13

Quinto tipo

Y de pronto me vi inmerso y seducido por esa figura, porque dejé de respirar, mi corazón no latió más, y mi vista ya no respondió; estaba yo mismo frente a mí, me avistaba a mi mismo, porque ese era yo en una imagen, y de pronto el conocimiento ya no estaba, porque el conocimiento era yo; no fui corpóreo  no tuve figura y hacia la nada me reduje finalizando la subsunción. Mi mente se liberó y recorrió su totalidad, como si volviese a nacer, entre colores opacos y rojizos ondulantes, entre melodías extrañas e inversas que no podrías imaginar jamás; porque lo que debía ser no lo era, lo que fue estaba presente, y como no debía ser se manifestaba abstractamente, desvanecía pero resucitaba a la vez. No fui tangible ni cognoscible, fui yo de nuevo y otra vez.