Ubi vos exigo evolutio, ego volo ascio vestrum animo. Tu es pestis.

© Francisco Javier Maureira P. 2005 - 2017

18.10.10

Desahucio.

En tan sólo unos minutos bajo tierra el cielo se tornó tenue, repentinamente, y la gama azul ya no deslumbró más en mis ojos. Al tan sólo pisar el asfalto sin resplandor, con sorpresa se capturó mi alma, perdiendo el regocijo y descubriendo poco a poco las pisadas en la arena. El estómago se me revuelve, y el corazón presiona el pecho de forma latente con fuerza, con una fuerza que ruboriza las mejillas quitando el aire con la presión; la vista no se salva, sino que desvanece poco a poco, y yo ahí, callando un sueño o la ilusión, de espalda en seco contra el concreto.