Del infierno fue expulsado por vuestra culpa,
su reinado colapsó por su afecto hacia ti.
Él aprieta los dientes al saber que no puede luchar,
batallar la pelea interior.
Déja de atemorizarle,
para porfavor, de desgarrar su carne.
No quiere estar mas aquí,
no necesita tu mirada atravesarle,
ya no sonrías que no es lo mismo.
Estás dañado y necesitas repararte.
¿Cuál "cariño", si ya no estás en la tierra?
¿Donde estás, o acaso también eres nada?
Él miró al cielo y vió la noche,
sintió como cenizas caían y rozaban su rostro.
Sabía el significado.
Él ya comienza a tener sed de sangre.
Él se va a vengar.
Pero porfavor, quédate,
vuelve en ti.
Tu no deseas en el fondo estar solo,
él no desea alejarte del todo.
Él necesita momentos para planear, aveces.
Está disfrutando éste dolor,
está dispuesto a sentir que está vivo.
No lo mal entiendas,
pero él quiere volver al infierno.
Desea con toda su alma dañar,
desea lastimar,
desea cobrar venganza para ti.
Desea devolver tu vida.
Verdaderamente desea el infierno aquí,
busca torturar gente.
Su naturaleza se alza.
Realmente desea ser él quien torture,
y no ser él el torturado.
No es tu culpa, obviamente.
Su corazón es negro, como el dolor.
Tu eres importante,
pero él está pensando otorgar el suicidio.
Él no está enamorado.
Sin entramparse, abandonar el juego del deseo de el amor, de las
pasiones... de el fantasma de todo lo que no es, con sus cargas potentes,
en la insatisfac...