No soy yo mismo. No temo de tí, ya no me haces temblar. Juego a ser quien sea. Mi escencia la mantengo, pero ya no me haces sentir igual. No soy yo mismo. Me golpeas fuerte, me golpeas rápido. No soy yo mismo; soy nadie.
Sin entramparse, abandonar el juego del deseo de el amor, de las
pasiones... de el fantasma de todo lo que no es, con sus cargas potentes,
en la insatisfac...